Gas Vehicular: ¿Cómo ha sido la evolución del Gas Vehicular en Colombia desde comienzos de este milenio?   

 John Jairo Contreras: El gas natural es una fuente energética muy versátil, genera soluciones en distintos frentes; generación y cogeneración eléctrica, procesos térmicos industriales, movilidad, cocción, calefacción, etc.

 El GNV, a través de la conversión de vehículos de gasolina a gas, logró a lo largo de estos 20 años posicionarse en el nicho de transporte de pasajeros y usos comerciales con vehículos ligeros (taxis y camionetas de plataformas, etc.), acompañando como aliado estratégico a propietarios, generando siempre ahorros frente a los demás energéticos, pero el tamaño de consumo de este nicho fluctúa en relación con la competitividad gas-gasolina.

Cuando el ahorro supera el 50% crecemos exponencialmente pero cuando cae a niveles de 40% la demanda se contrae. En este momento tenemos una competitividad superior al 50% e inmediatamente respondieron las nuevas conversiones. Para dar un orden de magnitud, en los últimos 3 años tuvimos 400 conversiones promedio-mes, pero con el ajuste al precio de los últimos 3 meses hemos superado las 1.200 unidades por mes. Este segmento particular tiene un tamaño de consumo aproximado de 300 Mm³ al año en nuestros mercados y el consumo actual está en 180 Mm³-año, es decir, tenemos como crecer, pero el tamaño de esta actividad es limitado.

Otro tema que logró evolucionar el uso del gas fue desmitificar su uso. En la primera década de esta solución, el GNV generó una baja percepción de calidad; la experiencia de los clientes fue diferente frente al uso de la gasolina. La pérdida de potencia y aumento de mantenimientos se posicionaron en el discurso de algunos usuarios.

En la última década, gracias a procesos de calidad, auditoría a talleres, mayor experiencia y formación de los técnicos y el desarrollo tecnológico, hemos logrado dejar a un lado el “voz a voz” y hay niveles de confianza muy altos. Le pongo un ejemplo: en las encuestas que hacemos a nuevos usuarios al mes de la conversión, el índice de satisfacción es cercano al 95%.

GV ¿Y hoy cómo está el sector del Gas Vehicular en Colombia?

 JJC: El gas vehicular viene evolucionando para atender otros segmentos dentro de la movilidad. Básicamente, la fabricación de vehículos dedicados de fábrica por grandes constructores de motores a nivel mundial (Scania, Cummins, Weichai, Iveco), con estándares de emisiones Euro 6, enfocados a grandes, medianas y ligeras prestaciones, abre un espectro de posibilidades para Colombia como alternativa de recambio tecnológico de ultrabajas emisiones. La primera de ellas que pudimos aprovechar con mucho éxito fue la introducción de 2.150 buses al sistema integrado de transporte de Bogotá, este proyecto de TMSA es un total caso de éxito ya que en un periodo muy corto de tiempo logramos una cuota de la tecnología a gas natural del 35% del total de la flota del sistema, una de las flotas más grandes de Latinoamérica y un gran ejemplo de procesos intensivos de transformación del transporte.

 Luego dimos paso al transporte de carga; en este segmento contamos ya con más de 2.000 tractocamiones de transporte de carga nacional operando por las carreteras de Colombia, gracias al esfuerzo de toda la cadena de gas natural y fabricantes que han apostado en Colombia para esta expansión. Lo más interesante es que el potencial de vehículos mayores a 10,5 toneladas supera las 120 mil unidades, las cuales tienen con una edad media de 15 años, estándares de emisiones iguales o menores a Euro 3 y potencialmente, un sobrecosto en el uso de combustible por uso de Diesel superior al 20%, pese al escenario de subsidios que impera actualmente.

 Para preparar este terreno de crecimiento hemos avanzado en dos proyectos: 

• El primero es la financiación. La cadena del gas natural constituyó un fondo de financiación para la sustitución de flota en cabeza de personas con una o dos unidades, o la oportunidad para conductores de tradición para adquirir su primer camión, que son las personas donde la propiedad de todo ese potencial está concentrada en un 84%. Este fondo está por iniciar a partir de octubre y se espera que sea una palanca importante de crecimiento.
• La segunda es la construcción de estaciones de servicio (EDS). Varios agentes están desarrollando inversiones para aumentar la oferta de estaciones especializadas de carga. En el caso particular de VANTI, tenemos 3 EDS en operaciones totalmente camioneras y en construcción otras 4 que han representado inversiones por 28.000 millones de pesos, porque somos conscientes que, si no hay oferta minorista simultáneamente al crecimiento de la demanda, afectamos la experiencia y confianza de los transportadores.

El otro segmento clave es la carga liviana y última milla. En este segmento tenemos un potencial de más de 250 mil vehículos menores a 10,5 toneladas que tienen una edad superior a los veinte años. Actualmente hemos implementado conversiones cero kilómetros con garantía de fábrica, pero estamos listos para iniciar con las primeras 50 unidades de vehículos dedicados de fábrica, Euro 6, las cuales deben entrar en operación este año y
para nosotros es un hito pues cambiaría estructuralmente el transporte de usos comerciales livianos y medianos dentro de las grandes ciudades.

GV ¿Cuál es la realidad del país en cuanto a reservas de gas?

JJC: La pregunta que siempre me hacen es; ¿si hay gas para tal tamaño de oportunidad? La respuesta corta es: Colombia es un País beneficiado por la naturaleza dada la presencia de recursos naturales abundantes que generan bienestar, competitividad y seguridad energética al País. Ese recurso no brota de la tierra naturalmente, hay que extraerlo en procesos que en Colombia son responsables, liderados por los agentes productores y que deben ser promovidos y acompañados por el Estado para poder apoyar la transición energética. Por supuesto hay desajustes en la oferta contractual, algunos años hay sobreoferta otros años los recursos son más escasos, pero la verdad es
que con los grandes desarrollos que están en marcha, muchos de ellos offshore, la demanda de gas natural tradicional y el crecimiento de todos estos usos estaría garantizada para varias décadas.

La nueva disrupción del gas natural en la movilidad viene para segmentos de transporte intermunicipal. Ya el País cuenta con 3 buses intermunicipales en operación por más de seis meses, donde estamos recolectando la información
y replicando este modelo con los empresarios, encontrando unas perspectivas alentadoras de crecimiento en la próxima década.

GV ¿En materia de reglamentación, infraestructura y tecnología e inversiones de GNV cuál es el panorama?

 JJC: El gas natural en Colombia tiene la reglamentación más exigente y desarrollada de todos los energéticos para la aplicación en movilidad, contando con tres reglamentos técnicos que aplican para, talleres, estaciones de suministro y controles de combustible a través del Sicom, garantizando un combustible con los más altos estándares que entregamos a cada cliente en las distintas aplicaciones.

 Desde Grupo Vanti, la apuesta y grandes inversiones han permitido tener las 13 megasestaciones de suministro para la flota de Transmilenio más robustas de América Latina. Cuentan con equipos de última generación, brindan suministro a alta velocidad de tanqueo, logrando tiempos de carga promedio entre 7-10 minutos, con una confiabilidad de operación superior al 98,5%, y llevan más de cuatro años de operación ininterrumpida. Dichas estaciones son gestionadas por aplicaciones remotas, donde las 24 horas monitoreamos cada variable técnica de esta infraestructura, volúmenes, condiciones de seguridad y gestión de fidelización con nuestros clientes, lo cual garantiza la continuidad de la operación.

GV ¿Qué concepto le merece a Vanti la actual política del Estado sobre hidrocarburos, transición energética y movilidad sostenible?

JJC: En nuestra opinión, el Gobierno Nacional y los gobiernos locales tienen metas muy ambiciosas hacia la transformación acelerada de vehículos eléctricos e inclusive hidrógeno. Hemos tenido varios ciclos de pedagogía con distintos agentes porque valoramos esa ambición de trazar un camino tecnológico claro. Sin embargo, le damos la importancia al gas natural como la alternativa viable, sostenible y segura para desempeñase positivamente dentro de la transición energética.

No en todos los casos ser pioneros en la implantación de una disrupción es el camino adecuado porque falta conocimiento, confianza, soporte, distribución, competitividad, etc. El transporte de carga es muy exigente y requiere la garantía de que las decisiones tomadas permitan prestar un buen servicio, encajado en contribuciones como la competitividad del país, mejoramiento de la calidad del aire y reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, ahí está la potencialidad del gas natural.

Es importante recordar que el enemigo no es la tecnología ni el energético sino las emisiones y que se pueden tomar decisiones coherentes en diferentes frentes. Colombia no logrará la meta, solo enfocándose en el sector de transporte, pero tampoco logrará la meta sin hacer nada.

GV ¿De qué manera se ha visto la repercusión de las recientes alzas de la gasolina en el sector del GNV? ¿Cuáles son los “Pros” y los “Contras” de esta medida?

JJC: El escenario de aumento del precio de la gasolina no se trata de la formación de una nueva fórmula tarifaria sino restituir el precio de mercado de los combustibles sin la alta cuota de subsidios. Lo mismo pasará con el Diésel. La aplicación del FEPC, que es un Fondo para Estabilizar el Precio de los Combustibles frente a estacionalidades y variaciones significativas en el contexto internacional, después de la pandemia generó una distorsión del precio que se está corrigiendo tardíamente. Eso, por supuesto, causa un fuerte golpe para quienes dependen del uso de combustibles en sus actividades comerciales. Sin embargo, es el camino que debe darse y eso derivará en otros incrementos económicos dentro de la cadena del transporte de carga para restablecer la viabilidad económica de los empresarios. En el mundo se subsidian los combustibles líquidos en un importe casi dos veces lo que se gasta en educación, es una total incoherencia frente al discurso de carbono neutralidad y en eso no podemos caer.

En ese contexto, el gas natural vuelve a tener de manera estructural la competitividad que tradicionalmente ha mantenido en su historia.  Es muy buena noticia para este energético y se está viendo con una respuesta inmediata a nuevas conversiones, como ya lo mencioné. En Bogotá circulan más de 48.600 taxis, el 45% usan gas natural y el resto gasolina. Se viene hablando de generar tarifas diferenciales para taxis versus el resto del mercado lo que representa, solo para Bogotá aproximadamente 5.000 millones de pesos mensuales en nuevos subsidios más otros desafíos para el Gobierno como la identificación de los vehículos que puede optar al subsidio, fraudes, trasvase de gasolina, manejo de información, etc.

Como gremio, creemos que ese aporte económico se puede destinar mejor a la conversión de todo el parque de taxis a gas natural, lo que requeriría el equivalente a 6 meses de ese subsidio; así tendríamos, no solo una alternativa sin subsidios para las finanzas públicas, sino un beneficio para los taxistas, ya que, con un consumo de 5 galones diarios de gasolina, al pasarse a gas natural se ahorraría 800 mil pesos mensuales, lo que contribuye a satisfacer otras necesidades.

En el caso de nuestros mercados relevantes, una conversión a gas natural tiene un costo aproximado de $4 millones. Con los incentivos que hemos armonizado con Ecopetrol y TGI, el costo para el usuario final es aproximadamente $1 millón. Si logramos subsidiar, a través del Estado ese millón, logramos una solución con mayores beneficios para todos.

 GV ¿Cómo está la industria del GNV en Colombia, con relación a los demás países de Latinoamérica?

 JJC: Colombia siempre ha sido un referente en gas natural para la movilidad. Ser un país autosuficiente es una enorme ventaja y eso debe mantenerse con decisiones de política energética bien orientada.

 En el SITP de Bogotá tenemos oportunidades de crecimiento y esa flota nos posiciona en los primeros lugares en Latinoamérica, demostrando que es un energético con tecnología y preparado para grandes transformaciones de flotas en el mundo, que pueden cambiar drásticamente la calidad del aire de las grandes ciudades.

 En transporte de carga estamos creciendo, tendríamos mayor cuota de mercado con mayor oferta de vehículos dedicados para todos los jugadores de esta actividad pues unos optan por tecnologías europeas de gran prestigio y alta tecnología porque les da confianza, pero otros están dispuestos a probar tecnologías asiáticas más competitivas de gran desempeño. Creo que la llegada de oferta es beneficioso para todos en el mercado y ese ha sido el reto que hemos trabajado en todas las prestaciones.

 Llegarán también vehículos eléctricos, y son bienvenidos, la idea no es que una tecnología se posicione como dominador absoluto, sino que se diversifiquen los energéticos de baja y cero emisiones, sobre todo en el nicho en que cada tecnología tiene la potencialidad de generar mayores beneficios y en otros nichos que entren en competencia.

GV ¿Qué le espera a la industria del Gas Vehicular en Colombia, en el corto, mediano y largo plazo?

 JJC: Estamos en la era de vehículos dedicados a gas natural, lo que dominará el mercado en los próximos años. Venimos trabajando con diferentes fabricantes para la introducción de taxis, mini-camiones, volquetas, vans y otros vehículos, dedicados 100% a gas natural. Esto puede pasar en los próximos meses y años y si se mantiene este nivel de competitividad de precio y se mejora el del Diésel, veremos una expansión en la movilidad más allá de la presencia actual, sobre todo en grandes prestaciones. Por ejemplo, con la Secretaria de Ambiente de Bogotá hemos podido tener una conversación muy armoniosa para que estas transformaciones se den, sobre todo en la carga liviana y pesada de la ciudad. Solo en la capital, el 4% del parque automotor es responsable del 50% de las emisiones de material particulado en movilidad, lo que genera muertes de ciudadanos por enfermedades respiratorias y cardiovasculares.

* Marcela Aranguren Riaño
Directora Periodística Revista Gas Vehicular
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Agradecimiento a:
Henry Pabón Gómez
Jefe Comunicaciones Institucionales
Grupo Vanti